La piscina es uno de los elementos que más disfrutamos de nuestro hogar, especialmente cuando llega el verano. Y si tienes la suerte de tener una piscina cubierta y climatizada, puedes aprovechar también el resto del año para relajarte y darte un baño. Si estás pensando en hacer una piscina privada en casa, es recomendable que sigas unos cuantos consejos para que todo salga perfecto. Toma nota de los aspectos a tener en cuenta para construir una piscina privada.
Trámites legales para piscinas privadas
Antes de comenzar con el proyectos de construcción de tu piscina, debes cumplir con todos los requisitos legales. En España, la tramitación de piscinas de obra, poliéster o gunitadas corresponde al Ayuntamiento de la localidad donde vaya a estar ubicada dicha piscina. Así que debes dirigirte a tu consistorio para informarte y legalizar todas las licencias.
Lo primero que debes hacer es solicitar el pliego de condiciones, donde se detallan los requisitos para construir tu piscina privada. Normalmente, la licencia exigirá que el terreno sea edificable, que se cumplan las distancias pertinentes con el terreno del vecino y con la carretera, y que se verifiquen las conexiones de los desagües con la red municipal. También te pedirá un presupuesto para la obra, que se detallará en la licencia, y por el que pagarás los tributos correspondientes. Y si se trata de una obra mayor, te pedirá una copia del proyecto que haya realizado la empresa constructora, el arquitecto o el ingeniero colegiado.
Lo habitual es que la empresa que se va a encargar del proyecto se encargue de todos estos permisos. Esto nos lleva al siguiente punto a tener en cuenta en la construcción de una piscina privada.
Contratar una empresa profesional y fiable
La construcción de la piscina privada, ya sea de obra menor o de obra mayor, es un proceso complejo. Por eso, es esencial que el proyecto lo realice una empresa profesional, con experiencia y que sepa tramitar todas las licencias y tenerlo todo controlado.
El técnico de la obra te dirá qué puedes hacer, diseñará la mejor piscina que se adapte a lo que quieres, y solucionará todos los problemas que puedan surgir. No siempre el mejor precio garantiza un servicio profesional y de garantías.
Busca una constructora especializada de la zona, con referencias y con experiencia en la construcción de piscinas privadas.
¿Cuándo es la mejor época para construir la piscina?
Desde Llapasi recomendamos que el proyecto de construcción de las piscinas privadas se realice en invierno. Es mejor no dejarlo todo para el último momento, y que cuando empiece el buen tiempo, esté todo listo para disfrutar del baño. Los meses invernales y de primavera son ideales para comenzar la obra. Ten en cuenta que pueden surgir inconvenientes legales o técnicos que retrasen la obra, por lo que si la empiezas en pleno verano o a última hora, es posible que no podáis disfrutar del agua.
Cómo debe ser el terreno de la piscina
La elección del terreno es uno de los aspectos más importantes en la construcción de una piscina. Como te hemos comentado en el punto de los aspectos legales, el Ayuntamiento exigirá que se instale sobre un terreno edificable. La empresa constructora te dirá si tu parcela puede albergar una piscina, y cuál es el lugar más indicado. No debe hacer humedades, ni estar rodeado de mucha vegetación. Este estudio profesional es esencial en el proyecto. Una mala elección del terreno puede hacer que surjan problemas en el futuro, y que te veas obligado a gastar más dinero en reparaciones y remodelaciones.
¿Qué medidas y profundidad elijo?
Esto dependerá del tipo de terreno, del diseño de la casa y del estilo que más os guste en la familia. Normalmente, las piscinas privadas suelen oscilar entre los 5 x 3 metros y los 10 x 5 metros. Pero el técnico te indicará cuál es la medida máxima que puede tener tu piscina.
En cuanto a la profundidad, puede variar según los gustos. Las piscinas más habituales tienen entre 1 metro y 1,70 de profundidad, variando según la zona del agua. Sin embargo, la tendencia ahora mismo es a tener piscinas poco profundas, de máximo 1,50 metros, donde se puede hacer pie. El objetivo es que estén destinadas al ocio y al relax y no tanto a la natación. Además, si tienes niños, es más recomendable que no supere estas medidas. También hay que tener en cuenta que cuanto menos profundidad haya, menor será el gasto en agua, electricidad y productos químicos será mayor.
¿Quieres hacer tu piscina privada en casa? Ponte en contacto con nosotros, somos especialistas en la construcción de piscinas en Alicante, con garantías, profesionalidad y soporte técnico. ¡Tu sueño está al alcance de tu mano! El próximo verano, lo vais a disfrutar como nunca.